El motor en cualquier vehículo será el corazón del mismo, y por este motivo debe estar en perfecto estado para evitar problemas en el mismo. Si necesitas repuestos de la más alta calidad, los podrás encontrar en los despieces audi a4, porque allí podrás aprovechar para comprar repuestos de segunda totalmente certificados y a buen precio.

Pero, puede que no sepas sobre los cuidados que debes darle al motor de tu vehículo para que se mantenga en buen estado. Por este motivo, hoy te he preparado este post, con la finalidad de que puedas aprender a cuidar esta parte que será crucial para el funcionamiento del coche.

Consejos para cuidar el motor

Cuidar el motor será bastante fácil, pero debes fijarte en algunos consejos prácticos para hacerlo de una forma correcta:

Mantén una buena lubricación

La lubricación del motor es algo fundamental que debes tener en cuenta, en especial porque debes asegurarte de que esta se mantenga siempre. Verifica de forma periódica el nivel de aceite para asegurarte de que sea el indicado y así evitar desgastes en las piezas.

También debes hacer el cambio de aceite entre los 5.000 y los 30.000 kilómetros dependiendo del año de fabricación de tu coche. El tipo de lubricante también puede influir en el cambio de aceite, por lo cual, es importante verificar el manual de tu vehículo.

Revisa las correas

Las correas de tu vehículo deben estar en buen estado porque son las encargadas de mover las piezas del mismo. Por este motivo, debes estar revisando el estado de las mismas para que no estén a punto de romperse o que estén agrietadas.

En estos casos, lo mejor será cambiarlas antes de que se puedan romper en funcionamiento y causar graves averías a tu motor. Esto debido a que, si se revientan, podrían incluso dejar el motor totalmente inservible.

Cambio de los filtros

Los filtros más importantes que te encuentras en tu motor son el de aceite y el de gasolina, ambos encargados de atrapar las partículas de sedimentos presentes en estos líquidos. Estos deben estar en buen estado para mantener un funcionamiento óptimo en el motor.

Lo ideal es que cambies los filtros por lo menos una vez cada 12.000 kilómetros, porque así podrás asegurarte de evitar que el sedimento se acumule en tu motor. De esta forma, podrás asegurarte de evitar cualquier tipo de inconveniente, y disfrutarás siempre de la máxima durabilidad en tu motor.